Establecer un precio de venta adecuado para un producto es una decisión fundamental en cualquier empresa, pues impactará en su nivel de ventas, la rentabilidad que obtenga y su permanencia en el mercado.

Por ello es necesario que la gerencia, además de considerar aspectos internos (como el margen de rentabilidad deseado y los costos en los que incurre para elaborar el producto), considere a quién va dirigido (los clientes potenciales) y en qué mercado lo ofrecerá.

Fuente: Revista Actualícese Edición #91