La NIIF 16 es una norma aplicable desde el 1 de enero de 2019 para la contabilización de los contratos de arrendamiento de las entidades del grupo 1.
Por tanto, en los estados financieros del 2019 se observarán los primeros impactos de su aplicación, los cuales tendrán un mayor efecto en la contabilidad del arrendatario, debido a que bajo las nuevas disposiciones los arrendamientos deberán presentarse simúltaneamente como un activo y un pasivo en el estado de situación financiera, afectando los indicadores de endeudamiento y rentabilidad.